El Salvador: Un mercado pequeño pero extenso en microfinanzas
A pesar de ser el país más pequeño en extensión territorial de Centroamérica y no contar con una Ley de Desarrollo de las Microfinanzas, El Salvador presenta un mercado bastante diversificado y competitivo, con bancos privados incursionando en la industria, cooperativas de ahorro y crédito, instituciones financieras reguladas y no reguladas, ONG´s (fundaciones y asociaciones) y varias sociedades ofreciendo servicios financieros hacia el sector empresarial de la micro y pequeña empresa del país.
Más de 100 instituciones financieras que operan en el país, se dedican a ofrecer pequeños préstamos para los salvadoreños sin acceso a la banca tradicional y que quieren abrir un pequeño negocio o expandir el que ya tienen.
Varias asociaciones aglutinan a estas instituciones dedicadas a la industria de las microfinanzas, entre ellas, la Asociación de Organizaciones de Microfinanzas de El Salvador (ASOMI), con 14 miembros afiliados (13 IMFs y 1 central de riesgo) y que forma parte de la de la Red Centroamericana y del Caribe de Microfinanzas (REDCAMIF). El sistema cooperativo de ahorro y crédito está dividido en dos principales federaciones, siendo estas: Federación de Cajas de Crédito y Bancos de los Trabajadores (FEDECREDITO), constituye un total de 48 cajas de crédito y 7 bancos de los trabajadores; y la Federación de Asociaciones Cooperativas de Ahorro y Crédito de El Salvador (FEDECACES), cuenta con 32 miembros afiliados.
Las instituciones financieras legalmente constituidas en el país (de cualquier denominación jurídica), ofrecen al sector de la micro y pequeña empresa, una diversa y extensa gama de servicios y productos financieros, entre estos: el tradicional crédito productivo para las diferentes actividades económicas, créditos para vivienda (mejoramiento, compra, construcción), créditos para consumo, transferencia de remesas, ahorros-depósitos, tarjetas de débito-crédito, vinculaciones comerciales, seguros, otros; las principales diferencias en la oferta son los precios –tasas de interés-, asesoría, y servicio al cliente.
El Microscopio Global 2013 ubicó a El Salvador en el puesto número ocho del ranking de mejor entorno para las microfinanzas a nivel mundial. Esto gracias a que nuevas regulaciones en relación con la protección del consumidor financiero favorecen una mayor transparencia en los precios en el país.
En el marco de políticas públicas y marcos regulatorios, El Salvador en los últimos dos años ha tenido nuevas y/o reformas a las regulaciones existentes, entre ellas:
- Ley Contra la Usura, que ha impuesto límites a las tasas de interés (tanto a instituciones microfinancieras reguladas como no reguladas, así como a cualquier proveedor de crédito).
- Ley de Protección al Consumidor, que eliminó toda comisión inherente al crédito, provocando reformas y adecuaciones significativas en los sistemas de información de las instituciones financieras para adecuar sus sistemas informáticos a las nuevas exigencias legales.
- Ley de Garantías Mobiliarias, que entró en vigencia en abril de 2014, y que regulará el otorgamiento de créditos con garantías mobiliarias para aquellos empresarios de la micro y pequeña empresa que confieren en garantía sus bienes muebles, lo que significa que deberán de incurrir en mayores gastos a la hora de concretar este tipo de operaciones, entre otros aspectos.
- Ley de Protección, Fomento y Desarrollo de la Micro y Pequeña Empresa (aprobada por la Asamblea Legislativa, el pasado 24 de abril de 2014), que tiene como objetivo promover la creación, desarrollo y fortalecimiento de este sector, contribuyendo a fortalecer su competitividad.
Estas y otras iniciativas de Ley se han discutido y están siendo analizadas por las diferentes entidades estatales del país; por lo que se espera nuevas legislaciones que afecten, ya sea positiva o negativamente, al sector de la micro y pequeña empresa y a la industria de las microfinanzas.
Desafíos y oportunidades
En este contexto, entre los principales retos de la industria de las microfinanzas se encuentra el manejo adecuado de las tasas de interés a ofertar al sector, dado los nuevos cálculos de tasas de interés máximas legales por segmento de crédito que debe de publicar de forma semestral el Banco Central de Reserva de El Salvador.
Si bien esta nueva normativa trae transparencia para el sector financiero y mayor protección para el consumidor, tiene como contrapartida la posibilidad de que algunas microfinancieras dejen de ser rentables y deban abandonar el sector u optar por aplicar políticas más rígidas a la hora de otorgar préstamos, o las microfinancieras tienen como oportunidad mejorar la eficiencia y calidad en sus servicios y productos de crédito.
Los burós de crédito o servicios de información crediticia juegan un papel importante en el sistema financiero salvadoreño pero las microfinancieras no reguladas siguen sin tener acceso a toda la información del sistema financiero, lo que representa un punto para mejorar en el sector financiero y que representa una tarea pendiente para las entidades encargadas de la supervisión y regulación de El Salvador.
Microseguros en camino
En materia de diseño de nuevos productos ajustados a las necesidades de los clientes, la industria de las microfinanzas salvadoreña se prepara para dar un importante paso en el ámbito de los microseguros.
Desde abril a septiembre, las instituciones miembros de ASOMI pondrán en marcha la fase piloto del proyecto de “Microseguros en Centroamérica” de REDCAMIF. Este busca que los clientes puedan enfrentar más preparados situaciones inesperadas debido a pérdida de vida, inclemencias climáticas, problemas de salud, entre otras.
Los microseguros se ofrecerán en seis paquetes, iniciando con seguros de vida y de cáncer. Las primas de los seguros se ubicarán entre US$ 0,68 y US$ 8 (esto dependerá del plan adquirido por el cliente) y los montos asegurados irán desde US$ 1 mil hasta US$ 8 mil, con facilidades de pago, mensual, bimensual, trimestral y anual.
El mayor desafío del sector será entonces ajustarse a las nuevas normativas y continuar escuchando las necesidades de sus clientes, para acercar cada vez más a un mayor número de salvadoreños los servicios financieros y seguir apoyando sus actividades emprendedoras.
Lo invitamos a explorar nuestra "Guía de Países: El Salvador" para acceder a más datos sobre microfinanzas, inclusión financiera y ahorros en ese país. La guía ofrece cifras sobre el sector y links a bases de datos de MIX, FINDEX del Banco Mundial y perfil de países de Pro-Ahorros-FOMIN.
¿Cuáles son los desafíos de las microfinanzas y la inclusión financiera en El Salvador? Nos interesa su opinión. Déjenos un comentario en Twitter @Portal_MF.
Roxana Durán de Ayala es Directora Ejecutiva de ASOMI.
Mariana Martínez es Gerente de Contenido del Portal de Microfinanzas.
Las opiniones expresadas en este artículo, no reflejan necesariamente el punto de vista del CGAP.