Hoja de ruta: Inclusión financiera con equidad de género para las mujeres
De acuerdo con la literatura, la inclusión financiera es un medio para combatir la pobreza, la desigualdad, y elevar el bienestar y las condiciones de vida de los más pobres. La falta de acceso a los servicios financieros puede generar una trampa de pobreza y llevar a mayor desigualdad. La provisión de acceso a instrumentos financieros aumenta el ahorro, mejora la inversión productiva y amplía el consumo, y genera un mayor empoderamiento de las mujeres.
Colombia ha registrado avances en la política de género e inclusión financiera. Desde 2018, las autoridades financieras recogen información frente a la inclusión financiera de las mujeres y por primera vez se incluyeron metas asociadas con el acceso de las mujeres al sistema financiero en el último Plan Nacional de Desarrollo (PND 2018-2022). Desde esa fecha, 2,5 millones de mujeres han ingresado al sistema financiero, logrando que 87% de las mujeres adultas tenga un producto financiero y que el 72,7% lo tenga activo.
A pesar de estos avances, la brecha de acceso y uso de productos financieros frente a los hombres persiste. A diciembre de 2021, la diferencia en el acceso a un producto financiero entre hombres y mujeres era de 6,4 puntos porcentuales, la cual se amplía en ciertos regiones y territorios del país. Este contexto justifica definir una estrategia que aborde de manera particular la inclusión financiera de las mujeres, que permita definir objetivos y acciones concretas para cerrarla.
